Noticias Khose Nuxco Solidario

lunes, 22 de julio de 2013

¿Gendarmería nacional


¿Gendarmería nacional?

Ahora que Enrique Peña Nieto es oficialmente presidente electo de México, necesitamos examinar sus declaraciones de campaña. Una de sus propuestas es la creación de una Gendarmería Nacional, con los 40 mil o más soldados y marinos actualmente asignados a luchar contra el crimen organizado, pero poniéndolos bajo mando civil. Además, mencionó el aumento de efectivos de la Policía Federal de 36 mil a cerca de 50 mil. En términos de política, indicó que la prioridad sería reducir los tipos de delitos que afectan a los mexicanos en su vida cotidiana, como el secuestro y la extorsión. Indicó que México seguirá cooperando con EU para combatir la delincuencia organizada. La idea de una gendarmería merece consideración. Lo confuso es que las fuerzas federales de la Policía Federal ya tienen algunas de las características de una gendarmería. No está claro si habrá una redefinición de funciones o si tal vez la gendarmería sería una fuerza temporal que se emplearía hasta que las Fuerzas Armadas se hayan retirado y la policía regular pueda tomar su lugar. En cualquier caso, la idea del control civil de una fuerza militar en trabajos internos de la policía tiene sus ventajas, pero también complicaciones. Como entiendo el término, una gendarmería es una fuerza policial paramilitar que suele estar más fuertemente armada y es más móvil que las policías preventivas regulares. De esta clase son, por ejemplo, la Gendarmería Nacional francesa, los Carabinieri italianos, la Guardia Civil de España, y los Carabineros de Chile. Hay que tener en cuenta que todos estos países tienen sistemas unitarios. Los gobiernos centrales tienen más libertad en el trato con sus departamentos que un gobierno federal con los estados de una república. Las funciones de la gendarmería varían de un país a otro, pero por lo general incluyen la seguridad ciudadana, especialmente en las zonas rurales, el tránsito, el control de disturbios, protección de fronteras y una serie de habilidades especializadas, por ejemplo, control de explosivos, lucha contra el terrorismo y salvamento marítimo y de montaña. Las fuerzas son comparativamente grandes. Por ejemplo, la Gendarmería Nacional francesa cuenta con más de 100 mil soldados. La Guardia Civil de España cuenta con 80 mil. Estas fuerzas son o parte de las fuerzas armadas o están estrechamente vinculadas a ellas, lo que facilita la coordinación operativa. Una tendencia reciente, sin embargo, es poner la gendarmería bajo control civil, por lo general en los ministerios del interior. Este es el caso de la Nacionale Gendarmería francesa desde 2009. Los Carabineros de Chile se pusieron bajo el Ministerio de Interior y Seguridad Pública en 2011. El control civil tiene sentido porque la gendarmería se pone en contacto directo con la población civil a menudo en circunstancias violentas. Consideremos dos ejemplos. El presidente electo Peña Nieto ha mencionado que se utilizaría la gendarmería para apoyar a la policía local en la lucha contra el crimen organizado. Estas operaciones implican generalmente lidiar con bloqueos de carreteras y cateos, en los que la policía debe seguir protocolos estrictos y cooperar con las autoridades locales. Además, la policía tiene que hacer delicadas decisiones políticas si encuentra conexiones entre organizaciones criminales y élites locales o autoridades políticas. Un segundo ejemplo es el control de multitudes en marchas y manifestaciones. Éstas son operaciones complicadas y delicadas en las que la policía debe estar bien entrenada y debe manejarlas con cuidado. Las autoridades civiles deben tomar decisiones sobre si se debe usar la fuerza. En el caso de México, el control civil de la gendarmería plantea una cuestión interesante. La sede lógica es la Secretaría de Seguridad Pública, con una secretaria civil y la necesidad de coordinar las fuerzas policiales. Pero esto implica una concentración de fuerza y los recursos de una supersecretaría. También, las unidades militares se tejen en las estructuras de mando de forma compleja y no está claro cómo las unidades específicas se pueden asignar al control civil. Las negociaciones con las Fuerzas Armadas sobre presupuesto, jurisdicción y líneas de autoridad son delicadas. Peña Nieto ha puesto a flote un concepto que tiene un potencial. Veremos las decisiones difíciles en los detalles para ponerlo en práctica. Director del Proyecto México en la U. de Georgetown

atte EL GUARDIAN.

No hay comentarios:

Publicar un comentario